Mientras las autoridades y la población se encuentran preocupadas por el impacto de la pandemia del Covid-19 en la economía de las personas más vulnerables, hay otra situación que amenaza a la población y es generada por una norma que deja precio del GLP, que se produce en el Perú, al vaivén de la paridad internacional. Envasadoras de gas alertan que indicador Mont Belvieu, del petróleo de Texas está en alza y cada semana el balón de GLP sube S/ 0.50 para las plantas, pero a eso hay que sumarle fletes marítimos, así como traslado a Lima y provincias, ganancia del distribuidor, entre otros costos de una larga cadena hasta llegar a las manos del ama de casa. Abel Camasca, gerente general de la Asociación de Plantas Envasadoras de Gas del Perú (ASEEG) dialogó con Diario UNO y explicó por qué los peruanos no nos beneficiamos con la reducción del precio internacional del Petróleo y por el contrario sufriremos un fuerte impacto por la recuperación de los precios del crudo. Los incrementos de precios del GLP solo benefician a grupos que hacen uso y abuso de su posición de dominio y van en detrimento de las grandes mayorías.
— Podría explicarnos, ingeniero Camasca, ¿cómo está funcionando la regulación del precio en el caso del GLP con la paridad del costo internacional del petróleo?
— El GLP estaba coberturado desde el año 2004 dentro del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), de tal manera que se encontraba protegido por ese fondo en el que se fijaba una banda. Sin embargo, desde el año 2012 se está diferenciando entre el GLP envasado y el GLP a granel; a este último se le dejó supuestamente al precio de la paridad internacional y el envasado se quedó dentro del fondo.
— ¿Claro, pero en este momento de caída del precio internacional no debería bajar también aquí el costo del GLP?
— Claro, claro que sí, pero como le explicaba está la diferenciación entre el costo del envasado y a granel. Cuando el valor internacional del GLP se cayó junto con el precio del petróleo el fondo mantuvo alto el precio del envasado para recuperar caja mientras el GLP a granel bajaba, pero entonces ocurre la tragedia de Villa El Salvador porque los graneleros libres hacían negocio con el gas.
— ¿Y qué pasó entonces?
— Hubo presiones por parte de las corporaciones importadoras para que se sacara del fondo el GLP envasado y supuestamente el precio caería de acuerdo con el costo de la paridad internacional que en ese momento estaba a la baja.
— Y eso fue lo que ocurrió, ¿verdad?
— Sí, el 21 de abril con Decreto Supremo 007-2007-EM, el Gobierno retiró del fondo el GLP y con ello lo puso a nivel de la paridad internacional. Para esa fecha, el balón de gas explanta (en la puerta de la planta de producción) estaba a S/ 10.56 por balón, mientras que el precio era de S/18.60 en esa misma planta; es decir, debería caer en esos ocho soles para que estuviera al costo de la paridad internacional.
— ¿Y entonces por qué…?
— El 28 de abril que comenzó a regir el D.S. 007 Plus Petrol, que es nuestro principal productor, solamente bajo S/ 4.45; es decir que de S/ 18.60 bajó su precio a S/ 14.15, y hubo una protesta de la OPECU (Organismo Peruano de Consumidores y Usuarios) por no haber reducido el precio como debía. Eso caló en los medios.
— ¿Y cómo repercutió eso en las plantas envasadoras?
— Las plantas envasadoras comprábamos el producto a S/ 14.15 y tuvimos problemas en el mercado porque nos pedían que lo bajáramos a S/ 10.50, pero eso se ha ido agravando más todavía porque en la siguiente semana la paridad cayó otros 50 céntimos y entonces la diferencia ya no era S/ 4.15 sino S/ 3.85, pero en la percepción del público el precio internacional seguía la baja.
— ¿Cómo hicieron, entonces?
— Por cuatro semanas consecutivas el precio del GLP ha aumentado 50 céntimos semanal; es decir, la baja efectiva se ha convertido en S/ 2.15 por balón. Esto ha originado especulación de precios en el mercado.
— ¿En qué va a acabar todo esto?
— Mire, si la tendencia se mantiene, porque ahora ya se están recuperando los precios de los combustibles ya saliendo de la pandemia esto va a seguir al alza y como el GLP ya no está protegido por el fondo su precio está subiendo en promedio 50 céntimos por semana…
— ¿Perdón, esos 50 céntimos suben para las plantas envasadoras?
— Sí a las plantas, y eso significaría que para diciembre de este año el precio del balón de GLP aumentaría aproximadamente en 12 soles por encima del precio actual y para diciembre llegaría entre S/ 28 y S/ 30 el precio explanta.
— Y de continuar esta situación, ¿cuánto llegaría a costar entonces un balón de GLP al público?
El precio al público sería entre S/ 50 y S/ 60 porque se ha disuelto la reducción de S/ 4.15 y como la cadena es bien larga los distribuidores no se van a perjudicar.
— ¿Cuál sería la solución, ingeniero Camasca?
Debe haber presión por parte del Estado porque nadie va a comprar el gas en Texas, sino que se produce en el Perú, y el precio de paridad internacional debe ser el precio de explanta Pisco porque los productores le agregan al precio de Texas (Mont Belvieu) el costo del flete marítimo y el almacenaje más su ganancia.
¿Hay otra salida?
Se puede hacer algo bien concreto: que el precio del GLP vuelva al fondo de estabilización porque es un combustible del ama de casa y su precio no puede estar al vaivén del precio que le ponga el productor sacándolo del país.
ALGO MÁS
El Ingeniero Abel Camasca propuso que las plantas envasadoras tengan locales donde pongan a la venta balones de GLP con precios sugeridos. Igualmente podría hacer Petroperú en su cadena de grifos, pero lamentablemente hay muchas presiones que lo están impidiendo.